¿Necesitas ayuda?
Si tienes cualquier duda sobre productos, envíos, entregas, etc. mira en preguntas frecuentes o contacta con nosotros:
Te atenderemos de lunes a viernes de 9:30 a 14:30 hrs.
El concepto de tiempo es super abstracto. No se puede tocar ni oler, y por ello, es algo que cuesta mucho interiorizar. Tienen que darse muchos procesos madurativos hasta que los niños y las niñas son capaces de entender y dominar su medida,...
En esta sección de juguetes en oferta de Jugar i Jugar, encontraréis diferentes productos con jugosos descuentos, así como otros muchos que tenemos en oferta hasta... ver más
Cargando ...
Time Timer PLUS es un temporizador de gran tamaño (14 x 1...
El concepto de tiempo es super abstracto. No se puede tocar ni oler, y por ello, es algo que cuesta mucho interiorizar. Tienen que darse muchos procesos madurativos hasta que los niños y las niñas son capaces de entender y dominar su medida, entender cuánto ocupa una semana o verdaderamente, cuánto significa que aún tienen que esperar un mes y medio para su cumpleaños. Eso es mucho más que dos horas juntas, sin duda.
Pero eso no significa que no podamos ir trabajando con ellos el concepto de tiempo con ayuda de diferentes materiales como los que tenemos en esta sección. Por ejemplo, hablar del paso de las estaciones, los ciclos del sol-luna… Un calendario anual Waldorf es un apoyo precioso para sentir los cambios que percibimos en la naturaleza cuando avanza el tiempo y el concepto de ciclicidad en el que todos y todas estamos inmersos. En la tienda tenemos calendarios perpetuos para niños de madera, con pequeñas casillas para colocar duendecillos de colores y motivos naturales que les encantan.
El reloj de arena también es un compañero maravilloso. Primero porque es un poco hipnótico ver cómo cae lentamente y va formando un montoncito en la parte de abajo, pero luego porque te da una sensación buena de la duración de algo, asociando volumen y velocidad de caída al concepto de tiempo. Transforman lo abstracto en visual.
En sus primeros años, los niños y las niñas asocian el tiempo con sus necesidades fisiológicas. Se dan cuenta del paso del tiempo en referencia a dos de sus necesidades básicas: dormir y comer. Posteriormente, irán entrando en una etapa en la que el tiempo va ligado a la sucesión de acontecimientos y rutinas diarias: nos levantamos, desayunamos, tocar vestirse, nos aseamos, salimos a la calle… dormimos y vuelta a empezar.
A partir de 5 o 6 años, aproximadamente, empiezan a tener las primeras nociones de lo que es antes y después y aparece el concepto de “mañana” o de “ayer”. Aunque es normal que se hagan un poco de lío todavía y digan cosas como que ayer van a ir a la escuela o que mañana estuvieron en casa de la abuela. La confusión es síntoma de que están poniendo en práctica este aprendizaje tan difícil de asimilar.
Cuando alcanzan los 7 años, y a veces pueden ser 8 o incluso 9, es cuando ya empiezan a tener plena consciencia del tiempo y comienzan a dominarlo, incluyendo referencias al mismo en su lenguaje habitual: “dentro de 3 días nos vamos a la granja”, “quedan dos meses para las vacaciones”, “hace tres semanas que me hice esta herida”...
Además de ser conscientes de su presencia en el mundo en la escala temporal, el dominio del tiempo también es un paso más hacia su autonomía. Ello les permite ser capaces de organizar su propia vida, sin que nadie les tenga que repetir que es la hora de levantarse, de poner la mesa, de ir al cole...
Debes estar registrado para poder gestionar los favoritos.
Si tienes cualquier duda sobre productos, envíos, entregas, etc. mira en preguntas frecuentes o contacta con nosotros:
Te atenderemos de lunes a viernes de 9:30 a 14:30 hrs.